La formación de izquierda considera que el aumento de la cifra de desempleados por segundo mes consecutivo es la consecuencia directa de una política económica sin una orientación clara

Redacción/Iniciativa por El Hierro-Izquierda Unida Canaria considera que la subida del desempleo en la isla por segundo mes consecutivo es el resultado directo de una política económica que ha renunciado a una intervención directa en el empleo pero sin ofrecer orientaciones claras de hacia qué modelo caminar.

Para Abel Fernández, portavoz de IpH-IUC, “las anunciadas, y todavía no ejecutadas, subvenciones a la contratación por parte del Cabildo lo que ha conseguido es retrasar las contrataciones temporales de verano, sin que existan garantías de que en invierno se vayan a producir. Además al no destinarse ese dinero ni a inversión, ni a empleo público seguimos con una tendencia de inestabilidad en el consumo que hace que muchas empresas prefieran, en el mejor de los casos, mantener el empleo existente que proceder a nuevas contrataciones”.

Desde la formación de izquierda se considera que la política llevada desde la institución insular, que hasta la fecha ha sido el motor económico de la isla, de pretender delegar la reactivación en un sector privado que carece de fuerza ha llevado a que no sólo no se mantenga el empleo existente, sino que se destruya.

“De continuar la tendencia, y tras la timidísima bajada del segundo trimestre, vamos a volver a la misma situación que en 2015 en el último trimestre de este año. Para evitar eso se requeriría una intervención directa y urgente en políticas activas de empleo y en inversión pública, mientras que las medidas anunciadas conjuntamente con los ayuntamientos estarían pendientes todavía de su valoración por el Gobierno de Canarias”, afirma el portavoz de la organización de izquierda.

IpH-IUC entiende que los datos del paro por sectores y por estudios indican también la necesidad de reciclar a aquellas personas que sólo han tenido experiencia laboral en el sector de la construcción, algo que ni tan siquiera se contempla. “Pretender pasar de un modelo que concentraba a la mayor parte de la población trabajadora en la construcción pública o privada a un modelo más diversificado, o incluso, como parece orientarse el actual grupo de gobierno, al turismo, sin preparar previamente a la gente supone en la práctica excluir del mercado de trabajo a un sector importante”, ha declarado Fernández.